Estimado humano:
Si justo ahora estás leyendo esta carta, quiero darte la noticia que eres un gran afortunado, pues tardé millones y millones de años entre estrellas, galaxias y planetas para poder otorgarte esta oportunidad de leer, de reír, de llorar, de amar, de vivir
No pude crearte como un ser perfecto, ni como un ser divino, pero te otorgué alma y conciencia, te hice un ser libre, eres un ser de luz, pero habrás dado cuenta sólo si has despertado.
Estoy aquí para ayudarte a cumplir tus sueños, pero sé consciente de lo que me pidas; siembra en tu mente paz y tranquilidad, pues tus actos, pensamientos y palabras son el espejo de lo que en algún momento te regresaré cien veces más.
Ama mucho y ama siempre, pero recuerda que el amor no se trata de posesión sino de apreciar, admirar, compartir y sentir, pero recuerda que para poder amar a otros seres debes amarte primeramente a ti, tal cual eres, recuerda que tú eres parte de mi y si alimentas tu alma también alimentarás la mía y lograremos ese gran balance de la vida.
Lamento hacerte caer tantas veces, tropezar y quizás pienses que te he defraudado, pero debes saber que lo hago para que aprendas a levantarte, a levantarte con más fuerza.
Te llenaré de lágrimas en varias ocasiones, de tristezas, pero recuerda que al final tengo un equilibrio y en esa gran obscuridad siempre habrá una luz para ti.
A través de tu vida iré quitando a algunos de tus hermanos cercanos, pero no te preocupes, recuerda que todo tiene un propósito, la muerte es sólo una extensión de la vida, no mueren, sólo pasan a ser esencia y energía del universo, misma que tú respiras todos los días.
No estás solo humano, cuando te sientas solo recuerda que estoy aquí, te veo y te siento sería muy complicado regalarte una forma física de todo mi ser, pero te he regalado trocitos de mi alma, te he regalado una Luna que puedes contemplar todas las noches, las estrellas, el sol, te he regalado flores, te he regalado a una naturaleza perfecta, a tu madre naturaleza, Pachamama, Gaia debes cuidarla, amarla y respetarla, aprender de ella porque es sabia.
Yo no hice las religiones, ni las ideologías que sólo actúan completamente en mi opuesto, separando a las personas, clasificándolas, deja de lado el odio, la injusticia, el racismo, recuerda que todos “somos uno”.
Yo creé seres libres, por ello eres libre de darme la forma que tú desees, si es en forma de algún Dios, de una divinidad, una ideología o si simplemente no crees en mí.
Es muy complicado darte a conocer mis secretos, la historia de mi creación y mi propósito, simplemente deseo que aproveches este milisegundo que te he otorgado en toda mi historia, que vivas al máximo cada día que te otorgo
Por favor, haz que te recuerde, deja huella como humano en esta hermosa historia del universo.
P.D. Recuerda que cada acción que hagas con el corazón, tendrá ecos en todo el universo.
Gracias por tu comentario. Amalia