Pau


Tengo un amigo, soy mujer y tengo un amigo. Simplemente amigo.

Definición de amigo: Un amigo es una persona con quien se mantiene una amistad. Una amistad es una relación afectiva entre dos personas, construida sobre la base de la reciprocidad y el trato asiduo. Valores fundamentales en una amistad son la lealtad, el amor, la solidaridad, la incondicionalidad, la sinceridad y el compromiso.

Mi amigo está felizmente casado y es padre de un hijo precioso, eso no es motivo para que él sea mi amigo.

Juntos lo pasamos de maravillas, hablamos mucho, nos reímos mucho más, nuestras conversaciones son impresionantes, podemos hablar del tiempo, de economía, de trabajo, de nuestras familias.

Si él va de viaje siempre se acuerda de mí y vuelve con un detalle y lo mismo pasa si yo voy algún sitio de viaje.

Si algún día vamos a comer juntos, tenemos que entrar con la condición de no reírnos, porque juntos vuelvo a decir armamos mucho jaleo, las risas son imparables entre los dos y estamos esperando a ver cuál de los dos dice la tontería más grande.

Me quiere enseñar a tocar la guitarra y como tengo la mano pequeñita y gordita pues... no para de reírse de mí.

Es mi amigo y somos un hombre y una mujer.

Sí, puede existir una amistad entre un hombre y una mujer sin necesidad de sexo. Muchas personas no comprenden y creen que no puede haber una amistad de un hombre y una mujer si no se van a la cama.

Están equivocados mi amigo Pau, es mi amigo simplemente y para irse a la cama ya tiene a su mujer.

Pau es mi amigo y quiero seguir siendo su amiga toda la vida, porque juntos nos reímos de nosotros mismos.

Recuerdo un día que me llamó por la mañana, hablamos casi todos los días, pero este día fue especial porque me llamó muy temprano. La conversación fue surrealista.

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Empezó así:

"Pau: Amalia, no he podido dormir en toda la noche por tu culpa.

Yo: Pau, que yo he dormido muy bien y no te he visto en mis sueños, así que a mí déjame en paz y no me culpes de no haber dormido.

¿Qué ha pasado para que no hayas podido dormir?

Pau: Pues... he tenido un sueño y no he parado de reír, así que ahora estoy agotado.

Yo: Y qué hacíamos en el sueño para que tú te hayas reído tanto.

Pau: ¿Te lo cuento?

Yo: Ya estás tardando en contármelo, quiero saber que he estado haciendo esta noche y yo no me he enterado.

Pau: Fuimos a comer.

Yo: ¿Y comimos bien?

Pau: No nos terminamos la comida, porque nos invitaron muy educadamente a abandonar el local.

Yo: jajajajajaja, ¿Pau qué hicimos? Me estas poniendo nerviosa, mira que yo tengo muy buena fama en mi pueblo.

Pau: Pues imagínate, tú y yo comiendo, de repente alguno de los dos dijo una tontería de las que solemos decir cuando hablamos, y empezamos a reírnos. Las risas cada vez aumentaban más. Yo decía una tontería y tú decías otra aún peor. Teníamos un escándalo maravilloso. Los otros comensales nos miraban y se reían tambien de ver lo bien que nos lo estábamos pasando. Pero al dueño se ve que no le hacia gracia el cachondeo que teníamos que se acerco a nuestra mesa y muy educadamente nos dijo que si podíamos salir del local.

Yo: Pau eres un caso, que vergüenza!!! En mi vida me han echado nunca de un sitio y a tenido que ser contigo cuando me echen de un restaurante. Ya no voy a comer más contigo.

Pau: Eso no es todo, cojimos nuestras cosas y sin parar de reír salimos del local. Enfrente había una plaza con unos bancos y nos sentamos en uno de ellos y ahí ya la cosa fue a peor seguimos riendo por lo que nos había ocurrido.

Así que esta mañana me duele todo el cuerpo de la risa que he tenido."

Esta puede ser una de las muchas conversaciones que tenemos entre los dos.

Quiero a mi amigo Pau y jamás tendría algo más que amistad y cariño hacia él, porque así somos felices.

Es mi amigo, sé que puedo confiar en él. Le puedo contar cosas intimas y sé que se van a quedar ahí entre nosotros dos.

He querido escribir esta entrada y dedicársela a mi querido amigo porque he pasado unos días de bajón, y él ha estado ahí a mi lado, preocupándose por mí, llamando a una amiga que tenemos en común para saber de mí. Porque yo esos días regulares que he pasado no he contestado a sus WastsApp, no he contestado sus llamadas y se merece que yo le diga desde aquí.

PAU TE QUIERO





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