Es un adhesivo universal que pega bien casi todos los materiales. Es indicado para madera, corcho, papel, cartón, tela, cuero, piel, y laminados plásticos. Tiene el inconveniente de que humedece la superficie sobre la cual se aplica, por lo que el papel fino se deforma y se arruga.
Para todos los materiales rígidos, en cambio, la cola vinílica es muy eficaz y garantiza un óptimo resultado, incluso a largo plazo.
Modo de empleo: extender una capa uniforme sobre la superficie a encolar, con un pincel o con los dedos. Ejercer presión de unos minutos, para que adhieran bien ambas superficies, sobre todo a lo largo del borde. En materiales que se sequen con dificultad, como la madera, y sobre todo si la superficie encolada es muy amplia, es aconsejable poner encima algo pesado durante media hora.
ADHESIVO DE CONTACTO UNIVERSAL
Es muy resistente al agua y al calor pero no al hielo. Es extraordinariamente apto para muchísimos materiales, sean rígidos o flexibles, como el papel, el cartón. la madera, los aglomerados, los laminados y algunos plásticos.
No debe utilizarse sobre polietileno, polipropileno o planchas de poliestireno, porque los corroe y destruye su superficie.
Para todos los demás materiales es óptimo, pero no de opción para arrepentimientos ni cambios una vez terminado el trabajo, ya que difícilmente se pueden separar las partes encoladas sin estropearlas.
El adhesivo de contacto universal es tóxico y puede dañar la piel, se deben tomar el máximo de preocupaciones cuando se usa.
Modo de empleo: extender una capa delgada y uniforme sobre las dos partes a encolar. Esperar hasta que empiece a secarse y luego unir ambas superficies, ejerciendo una cierta presión durante unos minutos. Procurar no excederse en cuanto a la cantidad de cola, ya que si sobresale por los lados puede perjudicar el resultado final del trabajo.
ADHESIVO UNIVERSAL INSTANTÁNEO
Se trata del adhesivo más potente: basta una gota para pegar dos superficies entre sí de forma definitiva. Es ideal para unir cerámica, metal, algunos tipos de plástico y cuero. Por lo general se utiliza para pequeñas reparaciones domésticas.
Modo de empleo: limpiar bien la superficie a pegar, aplicar una goma del producto (más si la superficie es amplia) y colocarla enseguida sobre la otra superficie. Mantener cierta presión durante diez segundos, para que se adhiera bien. Evitar el contacto de la cola con las manos, pues es dañina para la piel.
COLA CALIENTE
Es ideal para realizar trabajos rápidos. Sus mayores ventajas son la facilidad de uso y la versatilidad. Une con rapidez los materiales más variados y garantiza una fuerte adherencia.
Modo de empleo: esta cola se vende en barritas especiales que se funden por calor. Las barritas se introducen en la pistola de encolar, que ha de conectarse a una toma de corriente unos minutos antes de empezar el trabajo. Conforme se van derritiendo las barritas, se tienen que insertar las nuevas. Se presiona la pistola para que salga y se va colocando en la superficie con cuidado de no quemarse y rápidamente colocar la otra superficie pues tiende a secarse rápido.
ADHESIVO EN AEROSOL
El adhesivo en aerosol se emplea para fijar decoraciones, escritos y etiquetas sobre vitrinas o paneles. Se adapta a muchísimos materiales, como el plástico, la tela, el papel, la cartulina, los laminados y el poliestireno. No deforma la superficie, ni siquiera cuando el material es muy delgado. Existen adhesivos en aerosol, para pegado permanente o para reposicionar. Este segundo tipo es muy apropiado en todos aquellos trabajos en los cuales es necesario mover el elemento encolado sobre una superficie.
Modo de empleo: el adhesivo en aerosol se pulveriza a una distancia de 15 a 20 cm sobre una de las superficies que se van a pegar. Es importante que la capa sea uniforme, de modo que la adherencia sea perfecta. Tras esta operación se unen ambas superficie.
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